Construir sociedad a través del diálogo: reflexiones del Certamen de Debate ESJ 2025
El Certamen de Debate 2025 del Externado de San José destacó el talento crítico de sus estudiantes, con Angie Tamayo como ganadora de la final. Durante la actividad, el rector, padre Jaime Parra, S.J., subrayó la importancia del debate como un espacio de diálogo respetuoso y constructivo para fortalecer la justicia, la paz y el bien común.

El pasado miércoles 13 de agosto, el Colegio Externado de San José realizó el Certamen de Debate 2025, en el cual cuatro estudiantes participaron en la fase de semifinal: Belén Meza (2.º año de bachillerato “D”), Alba Hernández (1.º año de bachillerato “C”), Gisela Meléndez (2.º año de bachillerato “D”) y Angie Tamayo (2.º año de bachillerato “C”).
Luego de desarrollar la moción “Las instituciones educativas deben orientarse a eliminar los exámenes escritos (pruebas objetivas) y sustituirlos por actividades prácticas, ejercicios y proyectos interdisciplinarios, como estrategia para mejorar la calidad del aprendizaje”, las estudiantes Belén Meza y Angie Tamayo pasaron a la fase final, quedando como ganadora la señorita Tamayo, tras presentar argumentos sólidos ante la moción “La Iglesia Católica, en El Salvador y en la actualidad, debe pronunciarse públicamente sobre los temas de la realidad política nacional”.



Durante el desarrollo de esta actividad, nuestro rector, el padre Jaime Parra, S.J., se dirigió a la comunidad con el siguiente mensaje:
Queridos estudiantes:
Hoy hemos tenido la oportunidad de acompañar esta última etapa del certamen de debate, en el que hemos podido apreciar la dedicación que estas valiosas compañeras han tenido para preparar temas, elaborar argumentos e incluso anticipar efectivos contraargumentos en este debate.
En esta jornada hemos escuchado con claridad y coherencia ideas que manifiestan una especial capacidad para organizar el pensamiento y expresar, con lenguaje preciso, planteamientos que evitan la ambigüedad y que se han visto apoyados en pruebas, datos y ejemplos relevantes que han demostrado la calidad y nivel del debate.
Lo que hemos contemplado el día de hoy, en esta etapa final del certamen de debate colegial, ejemplifica aspectos que requiere nuestra sociedad actual para tener verdaderos espacios de diálogo propositivo y constructivo.
En este sentido, la escucha activa se convierte en una necesidad para poder generar diálogo, no solo para identificar la fuerza o debilidad de los argumentos de un interlocutor, sino para buscar sinergias y espacios para la construcción de la solidaridad, la justicia, la paz y el bien común.
Igualmente, nuestra sociedad requiere de respeto y empatía. En una época de la información, de la libre expresión en las redes sociales, es necesario humanizar nuestra interacción digital, moderar nuestro lenguaje y aprender a ser respetuosos, incluso al disentir con la opinión del otro/a. Es necesario comprender el punto de vista del otro y abrirse a la diversidad de pensamiento, pero siempre desde principios humanos, pues por encima de cualquier argumento estará siempre la dignidad humana, por la cual debemos velar todos/as.
No debemos temer al debate. Con él podemos construir una sociedad basada en principios y valores que nos ayuden a madurar como ciudadanos y salir del infantilismo social en el que nos han hecho caer planteamientos autoritarios que dan por supuesto que la decisión u opinión de uno es el pensamiento único e indiscutible, y no permiten que otros planteamientos u opiniones puedan cuestionar, proponer y abrir horizontes que nos lleven a la verdad, la justicia y el respeto de la dignidad de todos.
Invito a todos nuestros estudiantes a incorporarse a estas actividades que buscan potenciar el desarrollo de habilidades y competencias para la vida.
Estas actividades nos permiten desarrollar el pensamiento crítico, que por medio del debate fomenta la capacidad de analizar información, evaluar argumentos y formar opiniones informadas.
- Puede mejorar nuestro modo de comunicación, pues ayuda a expresar ideas con claridad, con coherencia, a escuchar activamente y a responder de manera efectiva.
- Fomentan la empatía y la tolerancia, ya que nos permiten considerar diferentes perspectivas y desarrollar la capacidad de comprender y respetar a quienes piensan diferente.
- Fortalecen la capacidad de persuasión, pues podemos aprender a construir argumentos que no solo convenzan, sino que ayuden a generar sinergias y fortalezcan nuestra capacidad de construir juntos.
Finalmente, nos puede ayudar a enriquecer el discurso público, el cual en la actualidad se ve muy empobrecido, pues tiene como principio las medias verdades, que en el fondo no son más que mentiras y oscurecen la verdad bajo un manto de información reservada.
Un debate constructivo contribuye a una sociedad más informada y dialogante. Evita la indiferencia, el pasivismo y el silencio basado en el control y la represión de la disidencia.
En un mundo cada vez más fragmentado, debatir no es solo importante: es esencial. Es a través del intercambio y diálogo respetuoso que podemos salir de nuestras burbujas, cuestionar lo que damos por sentado y acercarnos a quienes piensan distinto. El debate no busca imponer, sino comprender. Y hoy más que nunca necesitamos esa comprensión para construir algo mejor, juntos.
Les invito a que se sumen a este esfuerzo por crecer como personas integrales que funden sus argumentos en los valores y principios que construyen un mundo más humano y justo para todos.
Mi agradecimiento al profesor Rafael Góchez por la organización del certamen y el acompañamiento que ha dado a los estudiantes durante todo este proceso. Igualmente, felicito y agradezco a todos los estudiantes que han participado en las diferentes etapas y que han crecido en todo este proceso. Un aplauso fuerte a todos y mi profundo agradecimiento por lo vivido el día de hoy.
